Para el momento más importante de la coronación del rey Guillermo Alejandro,Máxima Zorreguieta, flamante reina consorte, eligió un vestido azul eléctrico del diseñador holandés Jan Taminiau.
La argentina deslumbró caminando de la mano de su esposo hacia el altar central de la Nueva Iglesia, donde se llevó a cabo la jura del Rey y el primer discurso de Guillermo como soberano de Holanda.
A Máxima (desde ahora Su majestad, reina y princesa de los Países Bajos y de Orange-Nassau) se la vio emocionada, aunque nunca perdió la compostura y se limitó solo a esbozar una tímida sonrisa.
Tradicionalmente, el azul es es el color de la realeza para dar la bienvenida a un rey.
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